El Trabajo Social Sanitario presente en el documento Condicionantes sociales y del contexto familiar que sería recomendable incluir en la Historia de Salud Digital del Ministerio de Sanidad
El 29 de diciembre de 2023 fue aprobado por el Ministerio de Sanidad el documento Condicionantes sociales y del contexto familiar que sería recomendable incluir en la historia de salud digital en el marco del Plan de Acción de Atención Primaria y Comunitaria 2022-2023, cuyo objetivo era la inclusión en la Historia de Salud Digital de manera homogénea a través de un grupo de trabajo formado por las CCAA y el Ministerio de Sanidad de los condicionantes sociales y del contexto familiar de las personas. El texto hacía referencia al trabajo social exclusivamente en la recogida de datos, pareciendo que es independiente de la intervención social y propia de cualquier tipo de profesional, independientemente de su preparación.
Desde el Consejo General del Trabajo Social (CGTS) se valoró positivamente que se decidiese incluir los condicionantes sociales y del contexto familiar en la Historia de Salud Digital, pero en enero de 2024 se reclamó al Ministerio la incorporación del trabajo social en el ámbito de la salud dentro del conjunto de profesiones sanitarias y la modificación de la Ley 44/2003 de ordenación de las profesiones sanitarias (LOPS), y en concreto, se manifestó nuestra discrepancia y malestar con el Ministerio de Sanidad por reducir nuestra labor a la recogida de datos.
Tras esa comunicación el Ministerio de Sanidad contactó con el Consejo General del Trabajo Social para revisar el documento “Condicionantes sociales y del contexto familiar que sería recomendable incluir en la Historia de Salud Digital”. El documento se publicó apresuradamente, porque tenía que estar publicado en 2023 para cumplir con los hitos del PRTR de la UE, y esto impidió el poder trabajarlo de forma más colaborativa con las distintas partes implicadas. Se nos dio la oportunidad de revisar con calma dicho documento y a hacer aportaciones desde la Comisión de Salud del Consejo General del Trabajo Social, que fueron remitas en marzo.
En esta segunda parte del proceso el Ministerio de Sanidad ha recogido las aportaciones de muchas personas y colectivos, que han intentado reflejar en el último borrador del documento, presentado y comentado en una reunión este lunes 16 de diciembre.
En la reunión se ha reiterado por parte del Ministerio la importancia de incorporar el papel de las trabajadoras sociales sanitarias en el documento y se ha informado que el reconocimiento es un tema activo por parte de la DG de Ordenación de Profesiones Sanitarias.
Entre las modificaciones generales que se han realizado en el documento se han incorporado algunas de las cuestiones realizadas desde el Trabajo Social: por ejemplo, el orden de algunos condicionantes, un nuevo aparado de violencia de género y violencia en la infancia, los riesgos ocupacionales de interés (minería, industria química…), el registro de información sobre la situación administrativa de residencia en España, el núcleo familiar y/o de convivencia, ampliación del apartado de vivienda.
Aunque se ha incluido la interdisciplinaridad, pero el documento no definirá quién, cuándo o cómo se registrará la información, valorando que sea desde las comunidades autónomas. Se ha añadido a las trabajadoras sociales sanitarias en la enumeración de profesionales con permisos para visibilizar la información en el apartado de Recomendaciones para la implementación. Asimismo se ha incorporado nuestra recomendación de que la información será recogida progresivamente, según las circunstancias y orientadas a las intervenciones que se vayan a derivar de cada valoración incluyendo temas sensibles como la identidad de género y la orientación sexual.
En la sesión Raquel Millán, secretaria general del Consejo General, ha insistido que la mirada desde el ámbito social para trabajar estos aspectos psicosociales es complementaria al proceder de otras profesionales, pero los aspectos de las relaciones sociales y con el entorno se deben trabajar desde una mirada especifica de trabajo social sanitario, más allá de ofrecer información y asesoramiento de recursos. Asimismo ha insistido que la recogida de datos tiene que ir vinculada al “para qué” y no recogerse de forma amplia sin un objetivo asociado, e incluir de acuerdo a la normativa estatal el ítem de discapacidad y dependencia. Miguela Arevalo, presidenta de la AETSyS y miembro de la Comisión de Trabajo Social Sanitario del Consejo General, ha insistido que es importante saber el cómo, el quién y el para qué se recogen los condicionantes sociales.
Los próximos pasos al documento será publicarlo con la versión actualizada del documento en enero de 2025 e impulsar que algunos condicionantes formen parre de la Historia Clínica Digital interoperable del Sistema Nacional de Salud; consensuar un conjunto mínimo de condicionantes sociales a priorizar su inclusión y que sea incorporada por las comunidades autónomas.
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