El Consejo General del Trabajo Social participa en los Diálogos sobre el Bienestar y la Salud Mental en el Senado

Desde el Grupo Parlamentario Socialista del Senado han organizado los Diálogos sobre el Bienestar de la ciudadanía, una serie de encuentros relacionados con los pilares del Estado del bienestar, ideados como espacios de participación e intercambio de ideas entre entidades sociales, organizaciones profesionales y científicas, sociedad civil, parlamentarios y representantes gubernamentales.
En esta ocasión se ha celebrado un encuentro con motivo del Día Mundial de la Salud Mental (celebrado el pasado 10 de octubre), participando organizaciones representativas de la salud mental en España y representantes de las Comisiones de Sanidad del Congreso y del Senado.

El objeto de este encuentro ha sido compartir los avances en la materia, hacer balance de las iniciativas en Salud Mental del Sistema Nacional de Salud y escuchar las propuestas que trasladen las personas convocadas.

Desde el Consejo General se ha puesto de manifiesto que es necesario abordar la salud mental desde una perspectiva integradora asumiendo una mayor coordinación entre los ámbitos sanitarios, educativos y los servicios sociales, creando y generando espacios seguros.

Emi Vicente ha hecho hincapié en que una buena salud mental inspira a conseguir un propósito en la vida, y esta debe de ser la base de toda persona. La intervención del Trabajo Social en Salud Mental, siempre dentro del equipo multidisciplinar, se centra sobre la persona principalmente, sobre lo que ella es capaz de hacer o podría llegar a hacer, tratando de que la persona alcance los más altos niveles de funcionamiento e integración posibles. Para alcanzar este objetivo la intervención se articula a través de un proyecto individualizado que combine el entrenamiento y desarrollo de habilidades y competencias personales y actuaciones sobre el ambiente, tanto familiar como en el contexto social. Por todo ello, la interdisciplinariedad en la atención a la salud mental es imprescindible, aunque no exenta de dificultades.

En palabras de la presidenta, las funciones del trabajo social en salud mental están interrelacionadas con las del resto del equipo interdisciplinar, pero al trabajo social le compete todo lo relacionado con la intervención externa al propio servicio de salud, que podríamos definir como lo social y comunitario.
Debe ser compromiso del Trabajo Social, demandar y aplicar medidas concretas a fin de mejorar los entornos para la salud mental, propiciando cuidados, estableciendo ayudas, programas de aprendizaje social y emocional, combatiendo la violencia y el acoso, cambiando actitudes y fortaleciendo los derechos en la atención de los Sistemas Públicos del Bienestar Social. Así como, establecer redes comunitarias que abarquen un amplio espectro de atención y apoyos más allá del sector de la salud, diversificando y ampliando así las opciones de atención y su abordaje.

Desde hace más de diez años, venimos reivindicando que los profesionales del Trabajo Social Sanitario (ya sea desarrollado en hospitales, centros de salud, salud mental, adicciones, etc.) no son reconocidos/as como profesionales sanitarios/as.

El Consejo General del Trabajo Social ha sido interlocutor en todo el proceso y se ha puesto a disposición del Ministerio de Sanidad en reiteradas ocasiones para abordar y dar prioridad a una reivindicación histórica de la profesión. Día a día seguimos colaborando con otros agentes sociales (como grupos parlamentarios, asociaciones profesionales y organizaciones sindicales) involucrados con el fin de lograr en esta reivindicación.

Foto: Emi Vicente y Eva Granados Portavoz del PSOE en el Senado.