La violencia de género sigue imparable, siete asesinadas en 2019
El CGTS condena la última muerte por violencia de género en Tenerife, con la que el número de asesinadas por esta lacra asciende ya a siete en lo que va de año y 982 desde el 2003, cuando empezaron a registrarse los datos.
Denunciamos los escenarios de violencia existentes y en particular el asesinato constante, año tras años, a mujeres por el hecho de serlo. Los hechos nos confirman que la lucha y las movilizaciones como la del 15 de enero contra la violencia de género (#NiUnPasoAtrásEnIgualdad) deben continuar hasta conseguir una sociedad libre, igual y segura para las mujeres.
Una mujer de 60 años ha sido la última víctima de violencia de género tras hallarse su cuerpo sin vida el domingo en Santa Cruz de Tenerife.
Según datos de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género es la primera asesinada de 2019 que sí había presentado denuncia previa contra su agresor.
De las siete mujeres asesinadas en lo que va de año, cinco de ellas mantenían una relación sentimental con su agresor y tres de ellas convivían con él en el momento del crimen, mientras dos estaban en fase de ruptura.
El 1 de enero murió apuñalada en Cantabria la primera victima, y desde entonces se han registrado oficialmente dos víctimas en Andalucía, una en Cataluña, una en Castilla-León, otra en Aragón y la última en Canarias.
Como profesión estamos en contra de cualquier violencia machista y pedimos una vez más que se desarrollen todas de las medidas del Pacto de Estado Contra la Violencia de Género a través del Real Decreto-ley 9/2018, de 3 de agosto, la modificación el Código Penal y la ley de violencia de género. Exigimos un compromiso de todos los partidos políticos ante la puesta en marcha YA de estas medidas.
El martes 15 de enero fueron muchas y muchos los trabajadores sociales que salieron a manifestarse por las calles de decenas de ciudades españolas para defender los derechos de las mujeres, la dignidad y los derechos humanos.
Nos opondremos con determinación a cualquier partido político que pretenda recortar los derechos de las mujeres o las leyes que la protegen de la violencia de género.
“No se puede cuestionar leyes específicas para una violencia específica, estructural, como es la que se ejerce contra las mujeres por el mero hecho de serlo y porque existen hombres que aún consideran a la mujer propiedad suya”, subraya Emiliana Vicente, presidenta del CGTS.
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