Abarán: Cáritas y Cruz Roja alertan de que 50 familias del municipio están «con la soga al cuello»

La crisis económica no ha terminado. Al menos para centenares de familias abaraneras que están sufriendo carencias en necesidades básicas, según reconocieron las responsables de las tres organizaciones benéficas que trabajan en la localidad: Cruz Roja, Cáritas San Pablo y Cáritas San Juan Bautista.

El intenso y permanente trabajo en los almacenes agrícolas de la localidad dio un ligero respiro económico entre mayo y septiembre, pero hasta la próxima campaña, ya en 2015, las necesidades se van a multiplicar. De hecho, los responsables de las organizaciones señalaron que las peticiones de ayuda los tienen «desbordados».

Entre quinientas y setecientas familias, según la época del año que se trate, tienen inscritas las tres entidades sin ánimo de lucro que dirigen tres mujeres y amas de casa. Marta Amorós dirige Cruz Roja desde 2011 junto a 15 voluntarios; Geno Carrasco es la responsable de Cáritas San Pablo desde hace seis años y cuenta con 14 voluntarios, mientras María del Carmen Aroca es la cabeza visible de Cáritas San Juan Bautista en compañía de 12 voluntarios.

La situación es especialmente grave para medio centenar de familias que se encuentran «agobiadas y con la soga al cuello al no contar con ningún ingreso». Algunas de éstas familias no pueden hacer frente además al alquiler, la luz y el agua.

Cambios en el perfil

El perfil de la gente que acude a Cruz Roja y Cáritas ha cambiado en los últimos tiempos, explicaron. Hoy día se trata de familias de clase media que otrora tenían una situación cómoda y se han visto obligadas a recurrir tanto a Cruz Roja y Cáritas como a sus familiares al pesar sobre ellas órdenes de embargo, desahucios y cortes de luz y agua. «Algunas acuden a deshoras a nuestras casas por vergüenza a que les reconozcan, incluso abuelos, y es que no es oro todo lo que reluce», sostuvieron.

Más de un 70% del total de las familias necesitadas son abaraneras, que acuden dos veces al mes en busca de comida. Leche, galletas, azúcar, harina, pasta, legumbres y aceites son los principales alimentos que reciben procedentes del Banco de Alimentos que reparte tres veces al año, pero no los únicos. «En muchas ocasiones y gracias a los donativos anónimos que recibimos, nuestras cuotas, lotería y de la Fundación Azagra, en el caso de Cáritas, les entregamos ropa, calzado, electrodomésticos, fruta y hasta una cuna como hace escasos días le dimos a una mujer recién dada a luz, además de ayudas económicas para luz, agua y alquiler», explicaron las responsables de las organizaciones benéficas, quienes destacaron que «Abarán es un pueblo solidario».

El control de Cruz Roja y Cáritas a la hora de entregar alimentos y otros menesteres es total: «Es imprescindible que aporten fotocopia del DNI, empadronamiento, nómina si la tienen, el parte médico si están de baja, el recibo del alquiler y un certificado del Servicio de Empleo y Formación», señalaron las tres amas de casa, que concluyeron con un llamamiento a la población para que aporten ayuda.