«Hay una cosa mejor que un buen juicio; un buen acuerdo»

Aquella histórica máxima que reza ‘Más vale un mal acuerdo que un buen juicio’ puede tener los días contados. O quizá los años, a juzgar por lo que cuesta convencer a los ciudadanos de que la mediación es una opción muy útil antes de acudir a los tribunales. De eso debaten los más de cincuenta expertos que participan desde ayer y hasta mañana en las IV Jornadas Murcianas de Mediación, un procedimiento que permite la prevención y resolución de desavenencias con rapidez y privacidad, utilizando la ayuda de profesionales especializados que, manteniendo la neutralidad, ayudan a las partes a llegar a un acuerdo ventajoso para ambas sin acudir a un juez. La coordinadora de las jornadas es María Paz García-Longoria, decana de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de Murcia (UMU) y una de las más destacadas expertas nacionales en la materia. –¿Por qué decidieron organizar unas jornadas sobre la mediación? –Entendimos que era conveniente difundir la mediación para que los ciudadanos conocieran este instrumento y, además, como una forma de intercambiar experiencias entre profesionales. –¿Podría cuantificar el número de casos que se acogen cada año a la mediación en Murcia? –Es difícil de cuantificar. La Oficina de Mediación Intrajudicial comenzó su andadura en noviembre del año pasado. Todavía es pronto para hacer balance, aunque me consta que están poniendo mucha ilusión y dedicación. Podríamos avanzar que el 20% de los casos que llegan a este organismo son resueltos. –¿Cómo valoraría, entonces, la afluencia de interesados a esta vía extrajudicial? –Todavía es muy tímida. Hemos notado cierto impulso desde que se promulgara en 2012 la ley sobre mediación, que introducía las recomendaciones de la Unión Europea. Este tipo de regulaciones ayudan a que se recurra a este proceso antes de judicializar los asuntos. –Pero no sucede lo mismo en otros países. –La verdad es que no. En España podemos considerarnos jóvenes en este sentido. En EE UU o en Francia, por ejemplo, llevan ya tres décadas de experiencia. Aquí, aunque hemos superado los veinte años de formación, solo desde hace una década se han comenzado a articular dispositivos que permitan la actuación de mediadores. Y considero que el apoyo de los medios de comunicación y de las administraciones es crucial en este sentido. –¿Apoyo que usted cree que sería adecuado concretar en una ley regional? –Junto a la financiación para que su aplicación sea adecuada. Solo quedan dos comunidades autónomas que seguimos sin el paraguas que supone la Ley de Mediación. Y debería ser una ley integral, no reducida solo al ámbito familiar. –¿Considera que siempre es mejor un mal acuerdo que un buen juicio? –Considero que siempre es mejor un buen acuerdo. Porque así se satisfacen las dos partes. Y eso diferencia a la mediación del arbitraje, por ejemplo. –¿Cuánto suele durar un proceso de mediación? –Podríamos decir que, de media, entre dos y tres meses. Un juicio, en estos casos, siempre será más largo y costoso. –¿Sobre qué materias se producen más mediaciones? –En todos los sectores. Por ejemplo, entre compañías de seguros, en legislación vial, en el reparto de herencias, cuestión sensible donde las haya. Aunque insisto en que lo principal que debemos destacar es que la mediación favorece que ambas partes ratifiquen el acuerdo. Así que supone un final aceptado por ambas. De esta forma se evitan males mayores, problemas emocionales y se ahorra tiempo.

ENCUENTRO ENTRE JURISTAS EN EL PARANINFO

El presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Región, Miguel Pascual del Riquelme (izq.), saluda a Álvaro Cuesta, vocal del Consejo General del Poder Judicial, y a la decana García Longoria durante la apertura de las IV Jornadas Murcianas de Mediación que ayer acogió el Paraninfo de la Universidad de Murcia.