Jesús Abandonado aspira a prestar asistencia de 24 horas a indigentes

La preocupación de Jesús Abandonado por los más necesitados no entiende de horas. La fundación-patronato busca financiación para abrir las puertas de un centro de día en el que prestar una asistencia integral durante las 24 horas a los indigentes. Éste es uno de los grandes proyectos de la entidad y ayer se lo plantearon al presidente regional, Alberto Garre, en su visita a sus instalaciones. Según explicaron fuentes de Jesús Abandonado, el objetivo es «ofrecer un hogar» a los ‘sin techo’ que les evite tener que permanecer gran parte del día en plazas y jardines de la capital.

El proyecto de centro de día de Jesús Abandonado planea que estas instalaciones puedan acoger salas para realizar talleres y terapias y cursos dentro de los programas de orientación laboral. El local también estaría dotado con una sala de televisión, donde se podrían realizar cine fórum, y con una enfermería donde se prestaría a los indigentes servicios sanitarios, como podología, psicología… Jesús Abandonado ya cuenta con un local –fruto de una herencia– destinado a albergar este centro. Se encuentra detrás de su comedor social de Murcia, en la Calle Barahundillo, y, con unos 400 metros, cuenta con capacidad «para muchas personas».

El problema, explican desde la organización, es que el local se enmarca en dos edificios muy antiguos y precisa de una gran reforma. El coste, calculan, no será inferior a los 200.000 euros. Un montante que, esperan, pueda ser recaudado en poco tiempo gracias a la solidaridad de los murcianos.

Jesús Abandonado ofreció el pasado año casi 270.000 servicios, entre los desayunos del centro de acogida –50.044 desayunos a personas que pernoctaron por carecer de hogar, y 46.609 desayunos a residentes– y las comidas y cenas del comedor social–173.078 servicios–. Este último centro atiende aproximadamente a 500 personas diarias. En el año 2013 fueron atendidas cerca de 15.000 personas en el servicio de ropería y se facilitaron más de 15.000 duchas en sus instalaciones.

Octubre y noviembre fueron los meses en los que más comidas y cenas se ofrecieron, con 16.007 y 17.227 servicios respectivamente, según los datos facilitados por la entidad. El resto de los meses el número de beneficiados rondó los 14.000.

El centro de acogida dispone de 142 camas para la atención de transeúntes, y cuenta con 3 pisos de acogida destinados a residentes de larga duración. Ofrece acogida a unas 2.762 personas y unas 39.186 estancias.

Además, la fundación Jesús Abandonado cuenta a día de hoy con servicio de lavandería, tanto para personas en media estancia como en larga, peluquería de hombres y de mujeres, voluntariado en todos los servicios, psicólogos, trabajadores sociales, enfermería, seguimiento de pautas médicas, programas de búsqueda de empleo, departamento de comunicación y equipo de atención espiritual.

Garre destaca la «solidaridad» de sus voluntarios

El presidente regional, Alberto Garre, destaca «el ejemplo de compromiso y solidaridad real de trabajadores y voluntarios que colaboran con Jesús Abandonado todos los días». Garre visitó ayer las instalaciones de la fundación, acompañado por su presidente, José Fernández, y su director, Daniel López. «Desde hace más de 28 años, Jesús Abandonado, a través de una estructura sólida muy importante», recalcó Garre, «ofrece en Murcia alimentos y techo a los más necesitados y ha participado en la puesta en marcha de la mayor parte de los comedores sociales, economatos y almacenes de alimentos que se distribuyen por la geografía murciana». La Comunidad, remarcó, destina en torno a un millón de euros a esta fundación cada año.