Participación de España en la XXIV Sesión del Consejo de Derechos Humanos

España ha seguido defendiendo la importancia de los derechos económicos, sociales y culturales, y ha presentado, junto con Alemania, una nueva resolución sobre el derecho humano al agua y al saneamiento, que fue aprobada por consenso en el Consejo, y con el copatrocinio de 110 Estados miembros de las Naciones Unidas.

Nuestro país tuvo la oportunidad de mostrar su apoyo a los distintos titulares de mandato encargados por el Consejo de la promoción de los derechos humanos, participando en diálogos interactivos con la Relatora Especial sobre agua y saneamiento, el Relator Especial sobre verdad, justicia y no repetición o el Relator Especial sobre pueblos indígenas. En esta última intervención España reiteró su compromiso con la promoción de los derechos humanos en el ámbito empresarial. El compromiso de España con el sistema de Naciones Unidas para los derechos humanos quedo patente también por la participación en un panel sobre derechos humanos de niños cuyos padres han sido condenados a pena de muerte, un panel sobre integración de género y una discusión sobre pueblos indígenas.

España estuvo presente en las negociaciones de los distintos textos de la sesión, apoyando, entre otros resultados de la misma, resoluciones para la lucha contra la mutilación genital femenina, la discriminación de las personas con albinismo, la promoción del disfrute de los derechos por parte de las personas de edad, así como varias resoluciones para garantizar y proteger el espacio de actuación de la sociedad civil ante los órganos de derechos humanos de las naciones unidas.

Por último, España ha participado activamente en la adopción de resoluciones para cooperar en la mejora de la situación de los derechos humanos en Yemen y Somalia, así como para condenar las violaciones masivas de derechos humanos en Siria, incluyendo el uso de armas químicas, y solicitando libre acceso al país para los investigadores de Naciones Unidas, así como un llamamiento a la lucha contra la impunidad. Igualmente hemos participado en resoluciones estableciendo mecanismos para hacer frente a las violaciones de derechos humanos en la República Centro Africana y en Somalia. De cara a la lucha contra esas violaciones, España se sumó a la resolución del Consejo haciendo un llamamiento para que los Estados se abstengan del envío de armas a situaciones de conflicto cuando puedan ser usadas para la violación de derechos humanos, al tiempo que recordó la importancia de la ratificación universal del Tratado internacional de armas y su rápida entrada en vigor.